Metabolismo de la neurona. La neurona presenta un metabolismo muy intenso de tipo aeróbico. Significa lo anterior, que las neuronas requieren un constante suministro de oxígeno y de su principal alimento, la glucosa, entre otras cosas porque no tiene capacidad de reservar, aún en pequeñas cantidades ni lo uno ni lo otro.
Pese a que el peso del cerebro representa sólo el 2% de todo el peso corporal, éste consume en condiciones de reposo hasta el 25% de todo el oxígeno que ingresa al organismo. En los niños, este valor puede llegar hasta el 50%.
Así como los animales presenta una mayor capacidad de resistencia que los humanos en condiciones adversas, las demás células presentan mayor capacidad de resistencia que las neuronas en condiciones de una brusca perturbación de la homeostasia del medio interno. Incluso una corta detención del suministro de oxígeno a las neuronas, puede provocar cambios irreversibles en la actividad nerviosa e incluso la muerte de éstas. Lo anterior ocurre a los 20-30 minutos en las neuronas de la médula espinal y a los 5-6 minutos si se trata de las neuronas de la corteza cerebral.
El alto consumo de oxígeno por parte de las neuronas, es garantizado por una circulación sanguínea muy intensa. En efecto, la sangre circula por el cerebro con una velocidad 5-7 veces mayor que la del músculos esquelético en condiciones de reposo. Aproximadamente el 10% del volumen de la corteza cerebral es ocupado por la red de capilares.
El cerebro presenta de una manera muy abundante anastomosis arteria-arteria, vena-vena y arteria-vena, lo que reduce la acción pulsátil dentro de los vasos del cerebro, originada por las contracciones rítmicas del corazón y los movimientos rítmicos de la caja torácica.
Con relación a la glucosa, bien podremos decir que es el alimento exclusivo de las neuronas; de ahí la necesidad de contar con mecanismos muy efectivos en la regulación de la concentración de glucosa sanguínea, para así evitar sufrir perturbaciones muy graves que afecten el buen funcionamiento de las células nerviosas. La falta de un suministro adecuado de glucosa al cerebro causa lesión, coma e incluso la muerte de la persona.
Alimentarse muy bien y aplicar otros buenos hábitos de vida es crucial para mantener un buen funcionamiento de las neuronas.
Ejercitarse de forma continua tanto de forma física como mental también estimular la salud y buen funcionamiento neuronal y del sistema nervioso en general.
Lo mejor es empezar por mejorar los hábitos alimentarios aumentando el consumo de alimentos que aporten nutrientes como las vitaminas C, E y A, principalmente, todas con propiedades antioxidantes y regeneración o reparación tisular... todo con el fin de mantener en óptimas condiciones todos los tejidos que conforman al tejido nervioso.
Lo otro a tener muy en cuenta es realizar ejercicios de forma constante, tanto ejercicio físico como mental. Por supuesto el punto está en que nuestro cerebro y por ende nuestras neuronas reciban estímulos constantes de cosas que se nos dificulten para que así puedan mantenerse siempre activas... y si podemos aprender nuevas cosas mucho mejor.
Intentar aprender nuevas cosas y no desistir hasta lograrlo, es el mejor estímulo que pueden recibir nuestras neuronas para evitar que dejen de funcionar y en algún momento morir.
Practicar estas nuevas cosas aprendidas y seguir ejerciendo las cosas que antes ya conocíamos es una de las pautas claves a seguir durante toda la vida para que nuestras capacidades cognitivas no se deterioren de una forma brutal con el paso de los años.
Recibir estímulos constantes tanto de forma voluntaria como involuntaria nos permitirá mejorar nuestras cualidades motrices y así evitar que una por una nuestras neuronas vayan despareciendo para que enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson no se apoderen de nuestro cuerpo.
Tanto la buena nutrición como la práctica de otros buenos hábitos de vida (acostarse temprano, evitar el consumo de alcohol y cigarro, evitar el estrés, etc.) deben ir siempre de la mano si tu objetivo está en mantener el metabolismo de tus neuronas intacto hasta tu vejez.
Que no te de pereza poner en practica ejercicios simples como utilizar más tu mano no dominante, leer en voz alta, aprender nuevos movimientos (bailar, deportes, etc.), aprende a tocar un instrumento musical, aprender un nuevo idioma, conocer nuevas personas, viajar y conocer nuevos lugares... todo esto con el fin de mantener una salud óptima de nuestras neuronas y a nivel general de nuestro organismo.
Pese a que el peso del cerebro representa sólo el 2% de todo el peso corporal, éste consume en condiciones de reposo hasta el 25% de todo el oxígeno que ingresa al organismo. En los niños, este valor puede llegar hasta el 50%.
Así como los animales presenta una mayor capacidad de resistencia que los humanos en condiciones adversas, las demás células presentan mayor capacidad de resistencia que las neuronas en condiciones de una brusca perturbación de la homeostasia del medio interno. Incluso una corta detención del suministro de oxígeno a las neuronas, puede provocar cambios irreversibles en la actividad nerviosa e incluso la muerte de éstas. Lo anterior ocurre a los 20-30 minutos en las neuronas de la médula espinal y a los 5-6 minutos si se trata de las neuronas de la corteza cerebral.
El alto consumo de oxígeno por parte de las neuronas, es garantizado por una circulación sanguínea muy intensa. En efecto, la sangre circula por el cerebro con una velocidad 5-7 veces mayor que la del músculos esquelético en condiciones de reposo. Aproximadamente el 10% del volumen de la corteza cerebral es ocupado por la red de capilares.
El cerebro presenta de una manera muy abundante anastomosis arteria-arteria, vena-vena y arteria-vena, lo que reduce la acción pulsátil dentro de los vasos del cerebro, originada por las contracciones rítmicas del corazón y los movimientos rítmicos de la caja torácica.
Con relación a la glucosa, bien podremos decir que es el alimento exclusivo de las neuronas; de ahí la necesidad de contar con mecanismos muy efectivos en la regulación de la concentración de glucosa sanguínea, para así evitar sufrir perturbaciones muy graves que afecten el buen funcionamiento de las células nerviosas. La falta de un suministro adecuado de glucosa al cerebro causa lesión, coma e incluso la muerte de la persona.
Alimentarse muy bien y aplicar otros buenos hábitos de vida es crucial para mantener un buen funcionamiento de las neuronas.
Ejercitarse de forma continua tanto de forma física como mental también estimular la salud y buen funcionamiento neuronal y del sistema nervioso en general.
¿Qué hacer para evitar la muerte de las neuronas?
Lo mejor es empezar por mejorar los hábitos alimentarios aumentando el consumo de alimentos que aporten nutrientes como las vitaminas C, E y A, principalmente, todas con propiedades antioxidantes y regeneración o reparación tisular... todo con el fin de mantener en óptimas condiciones todos los tejidos que conforman al tejido nervioso.
Lo otro a tener muy en cuenta es realizar ejercicios de forma constante, tanto ejercicio físico como mental. Por supuesto el punto está en que nuestro cerebro y por ende nuestras neuronas reciban estímulos constantes de cosas que se nos dificulten para que así puedan mantenerse siempre activas... y si podemos aprender nuevas cosas mucho mejor.
Intentar aprender nuevas cosas y no desistir hasta lograrlo, es el mejor estímulo que pueden recibir nuestras neuronas para evitar que dejen de funcionar y en algún momento morir.
Practicar estas nuevas cosas aprendidas y seguir ejerciendo las cosas que antes ya conocíamos es una de las pautas claves a seguir durante toda la vida para que nuestras capacidades cognitivas no se deterioren de una forma brutal con el paso de los años.
Recibir estímulos constantes tanto de forma voluntaria como involuntaria nos permitirá mejorar nuestras cualidades motrices y así evitar que una por una nuestras neuronas vayan despareciendo para que enfermedades como el Alzheimer o el Parkinson no se apoderen de nuestro cuerpo.
Tanto la buena nutrición como la práctica de otros buenos hábitos de vida (acostarse temprano, evitar el consumo de alcohol y cigarro, evitar el estrés, etc.) deben ir siempre de la mano si tu objetivo está en mantener el metabolismo de tus neuronas intacto hasta tu vejez.
Que no te de pereza poner en practica ejercicios simples como utilizar más tu mano no dominante, leer en voz alta, aprender nuevos movimientos (bailar, deportes, etc.), aprende a tocar un instrumento musical, aprender un nuevo idioma, conocer nuevas personas, viajar y conocer nuevos lugares... todo esto con el fin de mantener una salud óptima de nuestras neuronas y a nivel general de nuestro organismo.